Casi dos meses han transcurrido desde que Lucrecia Peinado, esposa del presidente Bernardo Arévalo, salió del país. Aunque fuentes del Ejecutivo desconocen la fecha precisa de su retorno, aseguran que continúa al frente de las funciones que le competen.

Su salida inicial se produjo a finales de abril, con destino a México, en un viaje de carácter familiar. Desde entonces, ha visitado varios países, incluida una gira oficial por Taiwán y Japón.

En esa ocasión, Arévalo regresó a Guatemala sin ella y, según la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia, Peinado acompañó al mandatario en la visita oficial a Asia, participó luego en un evento en Viena, Austria, y posteriormente visitó a uno de sus hijos, quien reside en Europa.

La polémica sobre el paradero de la esposa del presidente surgió el 22 de mayo, cuando el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, informó de forma errónea que Peinado estaba exiliada en México.

En esa oportunidad, la Secretaría de Comunicación Social lo desmintió, y el mandatario costarricense ofreció una disculpa pública.

Se informó que, pese a su ausencia, Peinado continúa en coordinación con la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente (Sosep), según confirmó la titular de esa entidad, Zulma Calderón.

De acuerdo con la versión oficial, las reuniones se realizan de forma virtual cada semana.

Calderón agregó que Peinado cumple un papel de coordinación en la Sosep y reiteró que, en el reglamento orgánico interno de la Secretaría, ella no figura como funcionaria, aunque desempeña ese rol de acompañamiento dentro de la institución.

Aunque no se ha precisado una fecha para el regreso de la esposa del presidente a Guatemala, fuentes cercanas al Ejecutivo indicaron que podría retornar a finales de junio.

Destacaron también que, al no tener la calidad de funcionaria ni devengar salario del Estado, puede permanecer fuera del país si así lo decide.